¿Qué hizo San Vicente mártir?

San Vicente es uno de los tres grandes diáconos, junto con San Lorenzo y San Esteban que dieron su vida por Cristo.  Nació en Huesca, España. Su madre, según algunos, era hermana de San Lorenzo. Estudió en Zaragoza, junto al obispo San Valero, que tenía poca facilidad de expresión (era tartamudo), le nombró para que predicara por él.

Es la época difícil de las persecuciones a los cristianos por parte del Imperio Romano. Al pasar Daciano (que era un gobernador Romano) por Zaragoza, manda detener a Valero y Vicente, y trasladarlos a Valencia. Allí se celebró el primer interrogatorio. Vicente responde por los dos, de manera muy inteligente y con sabias palabras. Esto enfada mucho al Romano Daciano y manda al destierro (que es expulsar por la fuerza a alguien de su tierra) a Valero. Vicente es sometido a la tortura del potro (que es un horrible instrumento de tortura) Mientras lo torturaban, el juez invitaba al mártir a la negar a Cristo. Vicente rechazaba indignado tales ofrecimientos.

Enfurecido de nuevo el Oficial Romano, mandó aplicarle el supremo tormento, colocándolo sobre un lecho de hierro incandescente. Nada puede quebrantar la fortaleza y la fe del mártir que, recordando a su paisano San Lorenzo, sufre el tormento sin quejarse entre las llamas. Lo arrojan entonces a un calabozo siniestro, oscuro y fétido "un lugar más negro que las mismas tinieblas", dice Prudencio.

Daciano manda curar al mártir para someterlo de nuevo a los tormentos. Los cristianos tratan de curarlo. Pero apenas colocado en mullido lecho, como él había vaticinado, queda defraudado el Oficial Romano pues el espíritu vencedor de Vicente vuela al paraíso. Era el mes de enero del 304. Ordena Daciano arrojar su cuerpo al mar, pero las olas, lo devuelven a tierra para proclamar ante el mundo el triunfo de Vicente. Su culto se extendió mucho por toda la cristiandad. Es patrón de Portugal, de la ciudad de Valencia y de la ciudad de Vicenza (Italia).